Ayuda

10.1. Generalidades

BUCKMAN, R. (1988) I Don´t What To Say – How Help and Support Someone Who is Dying. Macmillan. Londres.
Incluye el presente libro consejos sensatos y prácticos sobre como hablar y escuchar a los moribundos. Analiza el proceso que precede a la muerte y sugiere formas diversas de ofrecer apoyo a los moribundos.

DUDA, D. (1987) Guía para cuidar en casa a un enfermo terminal. Pax México. México.
En el capítulo 6. La labor junto al enfermo en fase terminal (104-127). Las etapas del morir según la Dra. Elisabeth Kübler-Ross, cómo expresar al enfermo nuestro consentimiento de que muera, que significa nuestra labor junto al moribundo, carta de los derechos del moribundo, el duelo, el estado de ánimo de la familia y tu ritmo de actividad, las actividades familiares, las visitas, los niños como miembros de la familia, sobre los niños, los niños que mueren (123-126).
Capítulo 11. Preparación para la muerte y la que sigue después (188-200).

GÓMEZ SANCHO, M.; ET AL. (1994) Cuidados Paliativos e intervención Psicosocial en enfermos terminales. Las Palmas de Gran Canaria. ICEPSS. Instituto Canario de Estudios y Promoción Social y Sanitaria.
En los capítulos: 14. La comunicación en la relación de ayuda (265-278); 15. Las malas noticias (279-288)

KNAPP, M. L. (1995) La comunicación no verbal. El cuerpo y el entorno. Paidós Comunicación. 5ª Edición.
El autor examina con afán pedagógico los trabajos más importantes realizados hasta la fecha sobre el tema y ofrece el al lector una síntesis que es a la vez clara, rigurosa y científica. De este modo el texto, el texto resulta sugestivo y útil tanto a estudiosos y profesionales de las ciencias humanas como al lector no especializado.
Se abordan en 12 capítulos los siguientes temas: 1. Comunicación no verbal: perspectivas básicas (13-46); 2. Comunicación no verbal: perspectivas del desarrollo (47-82); 3. Los efectos del entorno (83-112); 4. Los efectos del territorio y del espacio personal (113-142); 5. Los efectos de la paciencia física y la ropa (143-178); 6. Los efectos del movimiento del cuerpo y la postura (179-208); 7. Los efectos de la conducta táctil (209-228); 8. Los efectos de las expresiones faciales (229-256); 9. Los efectos de la conducta visual (257-284); 10. Los efectos de las señales vocales que acompañan a las palabras habladas (285-322); 11. La capacidad para emitir y recibir señales no verbales (323-340); 12. Observación y registro de la conducta no verbal (341-360).
El autor a través de los ritos corporales, la apariencia, la distancia interpersonal y los gestos, plantea que se desarrolla la dimensión oculta de la comunicación que tiene tanta o más importancia que la palabra. La cual a falta de un nombre más adecuado denomina la comunicación no verbal.

LEBRUN, M. (1989) Médicos del cielo, médicos de la tierra. Luciérnaga. Barcelona.
La autora, Maguy Lebrun, es enfermera y durante más de 25 años ha trabajado en la “asistencia nueva”, acogiendo en su casa a gente desvalida a quien ha ayudado a nacer o morir.
En esta obra, Maguy junto a su esposo Naniel Lebrun, han sido elegidos por los “médicos del cielo” o guías espirituales para transmitirles las enseñanzas. La misión que se le encomendó les llevó a adoptar a 18 niños y a apadrinar a cuarenta y a acompañar a varios enfermos en su fase terminal.
Se divide la presente obra en siete capítulos: 1. El pan nuestro de cada día (17); 2. Los médicos (17); 3. Los enfermos (133); 4. Los médicos (171); 5. La muerte(213); 6. La reencarnación (245); 7. El grupo (289); A modo de conclusión (317-322).

MATTHEWS – SIMONTON, S.; SIMONTON, O. C.; CREIGHTON, J. L. (1995). Recuperar la salud. Los libros del Comienzo. Madrid.
Los autores: psicoterapéuta, doctor en medicina y profesional independiente de la psicoterapia, abordan en el presente libro nuestras reacciones individuales de respuesta al estrés y los factores emocionales que pueden contribuir al desencadenamiento y progreso del cáncer y otras enfermedades.
Consideran los autores que una actitud positiva, un sistema positivo de creencias y una mayor autoestima contribuyen no sólo a la supervivencia sino que hacen que la vida gane en color y en calidad.
El presente libro se presenta dividido en 2 partes: 1. La muerte y el cáncer, 2. Caminos a la salud. En la segunda parte se divide en: 8.- el programa: modos de funcionamiento; 9.- participar en la salud; 10.- “beneficios de la enfermedad”; 11.- aprender a relajarse y visualizar la recuperación; 12.- valor de las imágenes mentales positivas; 13.- superar el resentimiento; 14.- crear el futuro: establecimiento de metas; 15.- encontrar el guía interno para la salud; 16.- controlar el dolor; 17.- ejercicio; 18.- enfrentarse a los miedos, a la recaída y a la muerte; 19.- el sistema familiar de apoyo.
Se incluye bibliografía (págs. 291-297) con 97 citas bibliográficas de libros y artículos publicados en inglés.

PHILIPPE, N. (1996) El poder de la visualización. Ediciones Mensajero. Bilbao.
Noëlle Philippe, es psicoterapeuta y profesora, y en la presente obra nos da a conocer un nuevo camino para llegar al conocimiento de nosotros mismos: la visualización, un método maravilloso que gracias a las representaciones mentales, es capaz de provocar un cambio en nuestro estado interior.
Describe la autora, diferentes tipos de visualizaciones: de tener, de destreza, de transformación, de ser esencial. Poniendo ejemplos concretos y dando consejos prácticos. También aborda los obstáculos a la visualización y como personalizar el cambio.

RIMPOCHÉ, S. (1996) Destellos de sabiduría. Reflexiones sobre la vida y la muerte. Ediciones Urano. Barcelona.
El maestro Sogyal Rimpoché nos habla de los desafíos y satisfacciones del camino espiritual, de la aceptación de la muerte, de la meditación, del karma, de la compasión y otros temas que el autor expone con su habitual elocuencia y sabiduría.
Se presenta este trabajo a modo de una guía diaria, en el que se incluyen la lectura de meditaciones y reflexiones para cada día del año, empezando por ello el 1 de Enero y finalizando el 31 de Diciembre, de manera que nos lleven por el camino del descubrimiento de la naturaleza de nuestra mente y nos enseñen a reducir nuestro miedo a la muerte y a aprender a vivir más plenamente.

SPORKEN, P. (1978) Ayudando a morir. Aspectos médicos, asistenciales, Pastorales y éticos. Editorial Sal Terrae. Santander.
La sexta parte: La ayuda pastoral de los moribundos. Dividida en nueve grupos: 1. Planteo del problema; 2. ¿Por qué también un capellán.?; 3. la tarea pastoral; 4. el auxilio pastoral presupone una relación; 5. evangelización referente a cuestiones existenciales; 6. ayuda pastoral y administración de sacramentos; 7. la unción; 8. colaboración para bien del enfermo y 9. conclusiones.

STONE, G. (1997) Palabras de vida y muerte. Ediciones B. Barcelona.
La autora, profesional especializada en el cuidado a pacientes con enfermedades terminales, ha creado una asociación que se dedica a difundir un nuevo concepto de aproximación a la muerte. Sus cursos han tenido excelentes resultados tanto para las personas afectadas como para sus familiares más próximos y el personal médico que las atiende.
En el apartado 10: La relación con el moribundo (199-214); Mensaje al clero (215-220).

UFEMA, J. (1988) Cómo hablar a los pacientes moribundos. Revista Nursing. Edición en español. Vol. 6, nº 3, mes de marzo: Págs. 21-24. Doyma. Barcelona.
La autora, Clinical Nurse Specialist, Death and Dying. North Charles General Hospital. Baltimore.
Muchas enfermeras temen que dirán lo que no deben, cuando prestan cuidados a pacientes moribundos. La autora, que trabajó en un hospice durante 14 años y a ella se dirigen otras enfermeras en busca de consejo. Le dicen que desean ofrecer apoyo, que vacilan ante el temor de trastornar al paciente o ir contra del médico o de la familia.
La autora nos plantea cual es su consejo, ser honrada, y cuando le solicitan que sea más concreta, generalmente termina describiendo alguna de sus propias experiencias, como es el caso de la historia del Sr. Blanco la cual se esplica a lo largo del artículo en los apartados: en la oscuridad, atrapada en el medio, más sobre la historia, lo que usted puede hacer, tranquilice al paciente, ayude al paciente a elegir, un pensamiento final.

10.2. Acciones de apoyo 

BERMEJO, J. C. (1993) Asistencia integral al enfermo terminal en los hospitales y en los domicilios. Diócesis de San Sebastián.
Trabajo realizado por José carlos Bermejo en el 5º Cursillo Diocesano de Pastoral de la Salud, en Loyola, llevado al papel, en sus Anexos 1, 2 y 3, se incluyen ejercicios diversos para el trabajo con grupos los casos prácticos que se especifican.

GARCÍA, A. M. (1995) Grupos de apoyo para quienes asisten a enfermos agonizantes: algunos aspectos a considerar. Enfermería Clínica. Vol. 5; 6: 263-265.
Se justifica la necesidad de que la enfermera, como miembro del equipo asistencial forme parte de un grupo de apoyo como “lugar de encuentro” en el que expresar sus inquietudes, miedos, y fantasías de lo cuál puede salir beneficiada. Para ello deben tenerse en cuenta algunos elementos que configuran la estructura grupal.

GÓMEZ SANCHO, M. (1998) Cómo dar las malas noticias en medicina. Arán Ediciones. Madrid.
El presente libro viene a aportar información sobre ese gran bloque de la comunicación de las noticias no deseadas al paciente. El autor, doctor en medicina, Marcos Gómez Sancho orienta el presente trabajo hacia los médicos y los profesionales de la salud, dividiendo el mismo en 14 capítulos (no tiene índice): 1. Introducción; 2. Las malas noticias; 3. Decir o no decir la verdad; 4. Elementos orientativos; 5. Algunas consideraciones al respecto; 6. No quitar la esperanza; 7. La familia y la conspiración del silencio; 8. Las reacciones del enfermo; 9. Fases de adaptación; 10. La consciencia de la muerte; 11. El acercamiento de la muerte; 12. Comunicación y soporte en los últimos días; 13. Morir con dignidad; 14. Los niños y la muerte.
Escrito en un lenguaje sencillo sin otra pretensión que ayudar a los compañeros que antes o después se van a ver enfrentados a situaciones de este tipo, nos acerca el autor este pequeño documento.
Incluye la bibliografía referenciada al final (págs. 209-220).

KAPLEAU, P. (1990) El renacer budista. La rueda de la vida y la muerte. Arbol Editorial. México.
En los suplementos: consolar a los dolientes: lo que debe y no debe hacerse (pág. 387-390).

KÜBLER-ROSS, E. (1969) Sobre la muerte y los moribundos. Grijalbo. Barcelona.
Se incluyen algunas entrevistas con pacientes moribundos en el capítulo 10 (págs. 233-305) valiosas para un acercamiento al sentimiento de muerte humano. En el último capítulo “terapia del enfermo de muerte” la autora a la vista de todo lo anterior nos lleva a entender que el paciente deshauciado tiene necesidades muy especiales que pueden cubrirse si nos tomamos el tiempo para sentarnos, escuchar y averiguar cuales son, dándole a este proceso valor sobre todo de tipo relacional y de trabajo personal (págs. 337-346).

KÜBLER-ROSS, E. (1992) Los niños y la muerte. Ediciones Luciérnaga. Barcelona.
En el capítulo 14. Recursos: grupos y sistemas de apoyo (293-295).

MATTHEWS – SIMONTON, S.; SIMONTON, O. C.; CREIGHTON, J. L. (1995). Recuperar la salud. Los libros del Comienzo. Madrid.
Consideran pues, los autores, que una actitud positiva, un sistema positivo de creencias y una mayor autoestima contribuyen no sólo a la supervivencia sino que hacen que la vida gane en color y en calidad.
El presente libro se presenta dividido en 2 partes: 1. La muerte y el cáncer, 2. Caminos a la salud. En la segunda parte se divide en 12 capítulos, siendo el número 18.- enfrentarse a los miedos, a la recaída y a la muerte; y el 19.- el sistema familiar de apoyo.
Se incluye bibliografía (págs. 291-297) con 97 citas bibliográficas de libros y artículos publicados en inglés.

MEUROSIS-GIVAUDAN, A. y D. (1994) Crónica de un acompañamiento. Luciérnaga. Barcelona.
Anne y Daniel Meurosis-Givaudan, diplomados por la Universidad de Lille (Francia), dedicaron parte de su vida a la enseñanza de la lengua francesa. Desde 1971 como resultado de una experiencia personal, se han dedicado a trabajar e investigar las diversas esferas de la existencia.
Cuando un ser querido nos deja, a menudo sucede que no sabemos como ayudarle. ¿Qué quiere decir su muerte?. Nos revelamos, nos resignamos… pero esto nada soluciona. Frente a esta situación existe, sin embargo, una respuesta, una actitud adecuada.
Los autores, han podido acompañar durante los últimos meses de vida, el itinerario de Elisabeth, una mujer que padecía cáncer. Semana tras semana transcribieron lo que pudieron percibir y ver gracias al método de la descorporación que practican desde hace ya varios años.
Escrito con el corazón, el presente relato es de gran utilidad para aquellos que quieren ayudar a un ser querido que debe partir.

MITTAG, O. (1996) Asistencia práctica para enfermos terminales. Consejos para la familia y para la hospitalización. Editorial Herder. Barcelona.
En el capítulo Morir en el hospital (páginas 56-87) se abordan los siguientes apartados: la muerte en el hospital no es indigna; ¿Cuándo es conveniente la muerte en el hospital?; las condiciones en el hospital; la ilustración de enfermos incurables y de sus parientes; servicio de cuidados intensivos; acompañamiento de los moribundos en el hospital (83-87).
En el capítulo Morir en el hogar (88-128) se abordan los siguientes apartados: la decisión; ; preparativos y ayudas para la asistencia en casa; la asistencia básica; el apoyo de los demás; el acompañamiento del morirbundo (116-120); cuando llega la muerte.

RIMPOCHÉ, S. (1994) El libro tibetano de la vida y de la muerte. Ediciones Urano. Argentina, Colombia, España, México, Venezuela.
Capítulo 2: La muerte.

SHOSHANA, B. (1996) Comprender la enfermedad, aceptar la muerte. Obelisco. Barcelona.
En el capítulo 5. Comunicación sincera (págs. 75-94).

10.3. Grupos de autoayuda

PANGRAZZI, A. (1988). Creatividad pastoral al servicio del enfermo. 132-136. Editorial Sal Terrae. Santander.

ROGERS, C. (1987). Grupos de encuentro. H.F. Martinez de Murguía Ed. Madrid.
Carl Rogers describe en la presente obra los hilos que conectan todas las diversas experiencias de grupo, muy disimiles en slgunos casos en cuanto a la cantidad y características de los miembros, la duración y frecuencia de las sesiones, las técnicas utilizadas, etc.; explica en detalle las distintas etapas del proceso grupal y analiza los requisitos y funciones del “facilitador”. Un largo intercambio epistolar mantenido con una ex integrante de sus grupos (del cual se reproducen algunos fragmentos) permite, además, seguir de cerca los efectos producidos en ella por la experiencia y los cambios a que ésta dio lugar. Por último Rogers nos da cuenta de los resultados de un estudio de evaluación ulterior de 110 participantes en un laboratorio, y resume la aplicación del método a una importante cadena de establecimientos de enseñanza, llevada a cabo por el Centro de Estudios de la Persona que él dirige.

SAHLER, O. (1983) El niño y la muerte. Alhambra. Madrid.
En la TERCERA PARTE: Supervivencia (págs. 173-216) en el capítulo 18. Grupos de padres como ayuda en la aflicción (págs. 201-207).