Muerte y Edad

7. Muerte y edad

DELISLE-LAPIERRE, Y. (1986) Vivir el morir. Paulinas. Madrid.
Capítulo 2. El concepto de muerte en las diferentes edades de la vida, (págs. 145-202).

7.2. Infancia

ABENGÓZAR, Mª. C. (1994) Como vivir la muerte y el duelo. Una perspectiva Clínico-Evolutiva de Afrontamiento. Universidad de Valencia. Valencia.
En el capítulo 7. Niñez y muerte (págs. 59-78).

BAILLY, D. (1997) Angustia de separación. Masson. Barcelona.

FULTON, R.; MARKUSEN, E.; OWEN, G.; SCHEIBER, J. L. (1981) La muerte y el morir. Desafío y cambio. Editado por Fondo Educativo Interamericano. Puerto Rico.
SEGUNDA PARTE: La experiencia de la muerte.
La muerte y los niños (182-202): cuándo hablar sobre la muerte (Jackson, E.), el reino donde nadie muere (Kastenbaum, R.), cómo experimentan los niños aflicción (Grollman, E.).

FURTH, G. (1992) El secreto mundo de los dibujos. Sanar a través del arte. Luciérnaga. Barcelona.
Gregg M. Furth se graduó como analista en el C. G. Jung Institute de Zurich, diplomado en física por la Universidad del Estado de California, ha trabajado en la Universidad de J. F. Kennedy. Actualmente tras quince años de estudio sobre los niños y los adultos emocionalmente perturbados, se dedica a divulgar sus descubrimientos por medio de seminarios que imparte por todo el mundo.
La presentación del presente libro, esta realizada por la Dra. Kübler-Ross.
Se divide en seis partes del trabajo . 1. Los dibujos como expresiones del inconsciente; 2. Premisas. Bases de la terapia a través del arte; 3. Recopilación de dibujos. Enfoque y método; 4. Elementos esenciales para la comprensión de los dibujos. Mecanismos auxiliares de terapia y diagnóstico; 5. Consejos y advertencias; 6. Estudios de casos; conclusión; bibliografía de consulta con 24 cita; lecturas comentadas de referencias bibliográficas en torno a la interpretación de dibujos: incluye 55 referencias de gran valor; bibliografía general comentada brevemente con 12 citas.

GARNER, F. (1975) Cuando un niño muere. Revista Tribuna Médica. 10 de Enero. Madrid.
Lo que el médico puede hacer- la ayuda que se puede prestar.
El presente artículo periodístico analiza el dolor de los padres al perder un hijo.
El autor considera que se ha prestado poca atención las consecuencias psicológicas de la muerte repentina de un niño y la realidad es que los padres de estos niños se enfrentan a problemas especiales. Según el autor, el médico de familia, si sabe captar este tipo de pérdida y los terribles aspectos de la misma puede constituir una importante ayuda.
Se divide el artículo en: lo que usted siente, el síndrome repentino infantil; las quejas más frecuentes; cuando los padres son responsables de la muerte.

JACKSON, E. (1986) Diálogo en el seno de la familia. En Sociología de la muerte. Ed. Sala. Madrid.
El autor se esfuerza por entender el concepto que el niño tiene de la muerte, así como por encontrar los medios más adecuados de acercarse a la mentalidad infantil, llegando a conclusiones valiosas.
Parte pues de la realidad de que el problema está más en como proceder que en decidir cuando empezar a hablar. Se vale el autor de algunos trabajos realizados por el Yale Child Study Institute y de los escritos de Jean Piaget. Dividiendo el trabajo en los apartados: hasta los tres años, entre los cuatro y siete años, entre los ocho y once años, en la adolescencia, puntualizar, algunos casos, para concluir con unas reglas sencillas que pueden ser utilizadas por los padres y otros adultos que tengan que abordar el problema de la muerte en el contexto de la vida del niño y las conclusiones.

KÜBLER-ROSS, E. (1992) Los niños y la muerte. Ediciones Luciérnaga. Barcelona.
El presente trabajo de la Dra. Kübler-Ross, es el complemento final a su obra y está basada en la época que trabajó exclusivamente con niños, y ofrece a las familias de niños enfermos o ya fallecidos, la ayuda y la esperanza necesarias para sobrevivir. En un lenguaje sencillo y cálido Elisabeth nos habla de los miedos, dudas, confusión y angustia de aquellos padres confrontados con una enfermedad terminal o con la muerte súbita de un hijo.
Se divide el libro en los siguientes apartados: 1. Pensamientos (9-14); 2. El comienzo de la vida (15-42); 3. La muerte súbita (43-66); 4. Lesiones cerebrales y estados de coma (67-78); 5. Forma natural de preparar a los niños para la vida (79-100); 6. El duelo, catalizador para el crecimiento y la comprensión (101-126); 7. Niños desaparecidos, asesinados y suicidio infantil (127-150); 8. Tratamientos alternativos: la visualización (151-164); 9. Cuando los niños saben que van a morir (165-188); 10. Como pueden ayudar los amigos (189-216); 11. Los funerales (251-264); 13. Aspectos espirituales del trabajo con niños moribundos (265-292); 14. Recursos: grupos y sistemas de apoyo (293-295).

KÜBLER-ROSS, E. (1992) No hay ningún niño que no se de cuenta de su muerte inminente. Labor Hospitalaria. Nº 225-226. Julio-Diciembre. Vol. XXIV, pág. 258-261. Barcelona.
Extracto de un coloquio mantenido con la doctora Elisabeth Kübler-Ross con motivo de su visita a la Unidad de Cuidados Paliativos pediátricos del Hospital de San Juan de Dios de Barcelona, en ella responde a las distintas preguntas en torno al niño, la muerte, los cuidados, sus hermanos y padres, y en un lenguaje sencillo y cálido.

KUYKENDALL, J. (1992) Muerte de un niño. El peor de los secretos guardados. Capítulo 8 de: Agonía,
muerte y duelo. Ed. El Manual Moderno. México.
Se profundiza en cuando hablar sobre la muerte; el reino donde nadie muere y como experimentan los niños la aflicción.

MASSA, M. C. (1987) El desarrollo del concepto de muerte en la infancia: Un análisis psicogenético. Tesis doctoral. Universidad de Oviedo.
El presente trabajo tiene como descriptores metodológicos: investigación psicológica, método clínico, análisis cualitativo, encuestas, entrevistas estructuradas, método descriptivo, frecuencia.
Resumen de resultados: Aparecen tres etapas diferenciadas y coincidentes con los estadios evolutivos de Piaget. 1. De 5 a 7 años dificultad para definir la muerte. Evocando sólo casos extremos como vejez por lo que no le alcanza esa posibilidad, siendo el lugar de los muertos el cielo o el infierno. Niegan que los muertos puedan existir y no aceptan la posibilidad de retorno. 2. De 7 a 11 años aumenta la capacidad para definir y actuar sobre los acontecimientos no presentes. Llama la atención el cambio de la forma de exponer las causas de la muerte y conciben la existencia de razones internas biológicas. Se acepta la obligatoriedad, universalidad e inevitabilidad del fenómeno. 3. De 11 a 14 años hay un cambio cualitativo. Especula objetivamente sobre ello y se suele considerar como el fin de la historia individual. Hay una mayor finura en el análisis de los sentimientos y expresan las razones de sus propias reacciones.

MITTAG, O. (1996) Asistencia práctica para enfermos terminales. Consejos para la familia y para la hospitalización. Editorial Herder. Barcelona.
En el capítulo Cuando lo los niños mueren (155-174) se abordan los apartados: peculiaridades en el acompañamiento de niños moribundos, sólo un soplo de vida, el concepto de asistencia en la Clínica para mujeres del Hospital Central St. Jürgenstrasse de Bremen.

REDRADO, J. L. (1980) El niño y la muerte. Revista ROL. Año 2, nº 22: págs. 35-49. Barcelona.
Trabajo realizado por José Luis Redrado, mediante una encuesta – sondeo, que no tiene nada de ficha científica. Cogiendo el grupo de trabajo de niños de 8 a 10 años, divididos en seis grupos. Hecha la encuesta, se codificó y analizó. Completaron el presente estudio con tres apéndices que reflejan y sintetizan la reflexión anterior. Dibujos de los niños sobre la muerte, forma en que la desea y criterios para un aprendizaje a base de una catequesis.
Entre las conclusiones: Todos los niños comprenden, la distinguen y se dan cuenta del sentido que tiene como distinto del vivir; sin embargo no tienen una imagen de la misma y está en relación con las cosas; los sentimientos que predominan son la tristeza y el miedo, y la muerte es también desagradable de ahí también el que no deseen saber que se mueren y el que quieran morir en casa.
Los autores han comprobado que aunque los niños se turban cuando se habla de la muerte, sin embargo le produce extrañeza, no está acostumbrado, ha oído poco.
En el punto III se habla de cómo enseñar a los niños a integrar la muerte en su realidad vital.

SAHLER, O. (1983) El niño y la muerte. Alhambra. Madrid.
El presente trabajo realizado gracias a la participación de 19 colaboradores, a consecuencia de una Reunión en el Centro Médico de la Universidad de Rochester (1977) durante la celebración de un Simposio de dos días y medio de duración sobre el tema “el niño y la muerte”. El presente compendio, tiene además opiniones y teorías de algunos que no estuvieron presentes. A rasgos generales podríamos decir que afortunadamente o por desgracia, no existen términos absolutos, y en su lugar, cada individuo ha de aprender por su cuenta a entender al niño y su familia, para resolver casos particulares, y para ayudarle a él y a cuantos le rodean en sus esfuerzos para encontrar su lugar dentro del marco por la lucha con la muerte.
Se divide el presente y exhaustivo trabajo en cuatro partes:
PRIMERA PARTE: La familia y el niño (págs. 29-41) la cual incluye los capítulos: 2. Estructura y adaptación de la familia a la pérdida: colaborando a afrontar la muerte de un niño; 3. Modelos de comunicación en familias enfrentadas a enfermedades mortales; 4. El niño agonizante y la familia: misiones del asistente social; 5. El médico de cabecera y la familia durante y después de la enfermedad final (págs. 69-79); 6. Distintas alternativas para el cuidado del niño agonizante: asilo, hospital, hogar; 7. Efecto sobre la familia de la muerte neonatal; 8. Muerte repentina; 9. Muerte y genética en la infancia.
SEGUNDA PARTE: El médico y el niño mortalmente enfermo (págs. 119-172) el cual incluye los capítulos: 10. La relación de los médicos que trabajan con niños mortalmente enfermos y sus familias; 11. El especialista en asistencia crónica: ¿Y quién nos ayuda a nosotros?; 12. Reflexiones de un médico; 13. El punto de vista de una enfermera de plantilla; 14. Opinión de una enfermera especialista.
TERCERA PARTE: Supervivencia (págs. 173-216) incluyendo los capítulos: 15. los ritos mortuorios: opinión de un empresario de pompas fúnebres (págs. 173-180); 16. Reacción de los niños y adolescentes ante la muerte de un padre o un hermano; 17. Repercusión en los niños del suicidio paterno; 18. Grupos de padres como ayuda en la aflicción (págs. 201-207); 19. La aflicción de los abuelos (págs. 208-216)
CUARTA PARTE: Consideraciones éticas y educativas (págs. 217-264) el cuál incluya los capítulos: 20. ¿Dónde está Dios? (págs. 217-225); 21. El derecho a la información y libertad de elección del moribundo ¿es para menores?; 22. Programa educativo sobre la muerte (págs. 236-245); 23. Lecturas apropiadas para niños, jóvenes y padres (pág. 246).
Se incluyen además: Epitafio para la muerte de un niño en la página 265; reflexiones de una hermana (págs.266-268); reflexiones de una madre (págs. 269-274).

SHERR, L. (1992) Muerte de un bebé. Capítulo 7 de: Agonía, muerte y duelo. Ed. El Manual Moderno. México.

YALOM, Y. (1984) Psicoterapia existencial. Herder. Barcelona.
En el capítulo III El concepto de muerte en los niños (págs. 101-139). El autor nos refiere que existe una marcada discrepancia entre la importancia que tiene la muerte para el niño y la atención que se presta a este tema en la formación escolar.
Se divide el capítulo en: preocupación generalizada que sienten los niños por la muerte, etapas del desarrollo del concepto de la muerte, la educación de los niños sobre el tema de la muerte.

7.3. Adolescencia

ABENGÓZAR, Mª. C. (1994) Como vivir la muerte y el duelo. Una perspectiva clínico-evolutiva de afrontamiento. Universidad de Valencia. Valencia.
En el capítulo 8. Adolescencia y muerte (págs. 79-90); 9. Joven adultez y muerte (págs. 91-106).

BAILLY, D. (1997) Angustia de separación. Masson. Barcelona.

DIE TRILL, M. (1987) Niños y adolescentes con cáncer y aspectos psicológicos. Revista JANO. Julio- Septiembre. Vol XXIII. nº 784: pág. 35-41.
La autora nos refiere que debido al avance de la ciencia médica se ha producido uno de los mayores éxitos acaecidos en el último cuarto de siglo: la curación cada vez mayor de niños y adolescentes con cáncer.
Según Maria Die Trill, el diagnóstico oncológico en la población pediátrica plantea serios problemas para el enfermo, la familia y el personal sanitario. Basándose en su experiencia de varios años en el Memorial Sloan-Kettering Cancer Center de Nueva York, nos describe los aspectos psicológicos y sociales más importantes del cáncer en niños y adolescentes, así como las terapias psicológicas más eficaces en el control de reacciones secundarias a la enfermedad y su tratamiento. Desglosado en los apartados: Impacto del diagnóstico en la familia, El enfermo ante el diagnóstico, tratamiento psicológico.

KÜBLER-ROSS, E. (1981) Entrevista a una joven de 17 años; pág. 171-175. En La muerte y el morir. Desafío y cambio. Editado por FULTON, R.; MARKUSEN, E.; OWEN, G.; SCHEIBER, J. L.; Fondo Educativo Interamericano. Puerto Rico.
El artículo ofrece una penetrante mirada a la mente de una joven que se enfrenta a una muerte prematura debida a una enfermedad incurable de la sangre. Su entrevista revela varias percepciones que están relacionadas con nuestra comprensión de los pacientes moribundos. Sobre todo vemos la importancia de la comunicación afectuosa y del apoyo de la familia y del personal. La joven aprecia la oportunidad de compartir sus sentimientos en una atmósfera de confianza y de preocupación por ella. La aceptación de su condición es facilitada también por las creencias religiosas, las cuales incluyen el convencimiento de que Dios tiene un propósito, así como la su propia supervivencia espiritual después de la muerte física.

7.4. Adultos

ABENGÓZAR, Mª. C. (1994) Como vivir la muerte y el duelo. Una perspectiva clínico-evolutiva de afrontamiento. Universidad de Valencia. Valencia.
En el capítulo10. Mediana edad y muerte (págs. 107-122).

KÜBLER-ROSS, E. (1969) Sobre la muerte y los moribundos. Grijalbo. Barcelona.
Se incluyen en el capítulo 10 algunas entrevistas con pacientes moribundos (págs. 233-305) valiosas para un acercamiento al sentimiento de muerte humano.

7.5. Ancianos

ABENGÓZAR, Mª. C. (1994) Como vivir la muerte y el duelo. Una perspectiva clínico-evolutiva de afrontamiento. Universidad de Valencia. Valencia.
En el capítulo 11. Edad adulta tardía y muerte (págs. 123-150).

BENDER, M.; LLOYD, CH.; COOPER, A. (1996) Calidad de muerte. Atención al Anciano en la etapa final de la vida. TEA Ediciones. Madrid.
El presente libro, es el fruto de la colaboración de 3 autores que entre 1985 y 1988 se propusieron, en la zona oriental de Londres, clarificar las bases para tratar de la mejor manera, a las personas enfermas y desahuciadas en centros residenciales para ancianos, así como en sus casas o en la de familiares.
Los autores consideran que cuidar bien a los que están próximos a morir empieza mucho antes de que se pongan enfermos y a medida que se prolonga la esperanza de vida, crece el número de personas “de la tercera edad“ y la duración de esta última etapa de la vida. Crece a su vez el número de ancianos que no pueden valerse por si mismos, o que al menos, necesitan ser cuidados y atendidos por otros: familiares o profesionales.
El presente libro destaca la importancia, tanto del cuidado físico como psicológico. La buena atención al anciano tanto sano como enfermo. Se profundiza en la zona de atender y ayudar a moribundos y desahuciados pero también a ancianos sanos y vitales, defendiendo siempre la autonomía y libertad, de forma que en esta última etapa de la vida haya la mayor calidad de vida posible.
El libro se encuentra dividido en seis capítulos: 1. Observaciones y acercamiento (pág. 11-20); 2. Mitigar el impacto de las pérdidas (pág. 21-46); estancia satisfactoria (pág. 47-74); 4. Enfermedad y medicina (págs. 75-114); 5. Cuidados de la enfermedad y la muerte (págs. 115-142); 6. La vida sigue (págs. 146-154).
Bibliografía por capítulos (págs. 155-160).

NULAND, S. (1995) Cómo morimos. Alianza Editorial. Madrid.
IV. Las puertas de la muerte para los ancianos (75-96), V. Enfermedad de Alzheimer (97-120).

THOMAS, L. (1983) Antropología de la muerte. F. C. E. México.
En el capítulo XI. El anciano y la muerte: pluralidad de situaciones; el anciano y la muerte en la sociedad negro-africana; el anciano y la muerte en occidente (pág. 430-472).