La OMS calcula que en 2000 aproximadamente un millón de personas se quitaron la vida. Sin embargo, la organización también subraya que en ese mismo año, un número entre 10 y 20 veces mayor intentó suicidarse sin éxito.
Según los expertos, el fenómeno es resultado de una interacción de factores causales, incluidos enfermedades mentales, pobreza, abuso de sustancias tóxicas, aislamiento social, pérdidas, dificultades en las relaciones y problemas laborales.
Si bien la OMS destacó la necesidad de formar a más expertos para combatir el suicidio, señaló que esto no es suficiente, sino que toda la población debe hacer algo para ayudar a reducir el número de personas que tratan de resolver sus problemas con comportamientos suicidas.